Cuando nos ponemos a dieta, nuestro cuerpo asume que se está privando; por eso, se activa un dispositivo primitivo relacionado con la supervivencia: el deseo de carbohidratos, que son la principal fuente de energía DETALLES de nuestro cuerpo.
Cuando satisfaces esta necesidad clave, la sensación de antojos disminuye lentamente de forma normal, o bien se convierte en una idea consistente y constante.
Haz las paces con la comida
Trate de no identificar los alimentos como “buenos” o “negativos”; satanizar también un solo grupo de alimentos crea una intensa sensación de privación y también, en consecuencia, de una necesidad incontenible que puede causar un atracón.
- Cuanto mayor sea el tiempo en el que te privas de un alimento, más tentador resultará.
- Desafiar a las “autoridades alimentarias”
The food cops es esa voz interior que te corteja en función de tus opciones alimenticias: “si consumes esto, nadie te disfrutará”, “si pierdes el control en realidad has demostrado por ti mismo que eres un perdedor”, “no hay hay demasiados carbohidratos en la pasta “,” ya he consumido hoy, seguramente comeré mañana “.
Se establece a través de la dieta y se refuerza al cambiar de una dieta a otra y tener hábitos alimenticios ineficaces.
- Eliminar esta vocecita es una acción esencial en el consumo intuitivo.
- Disfrute de la sensación de saciedad
Para complacer la sensación de saciedad es fundamental reconocer que, según el comer instintivo, consumiremos lo que deseemos, cuando lo deseemos, pero ciertamente tendremos que convertirnos en oyentes ingeniosos de las señales que nos envía nuestro cuerpo y también reconocer la diferencia entre ansiedad, ansiedad, rabia, infelicidad, monotonía y ansias.
Descubre el placer de comer
¿Cuántas veces nos ha ocurrido consumir una galleta además de querer un delicioso helado de chocolate? Y también nos encontramos guardando 50 almendras, 1 manzana y también 10 pasteles de arroz (y sin sentirnos satisfechos), cuando podríamos habernos comido ese helado.
En el momento en que te ofrezcas por tu cuenta la oportunidad de consumir lo que desees, seguramente reconocerás que el deseo es mucho menos sólido de lo que crees.
- Enfrenta tus emociones sin utilizar alimentos
- Tratar de encontrar nuevos medios para consolarte, controlar tus sentimientos, distraerte y resolver tus problemas puede ser útil, no te concentres solo en la comida.
- Considera tu cuerpo
Intentamos no criticar continuamente las formas y el tamaño de nuestro cuerpo. Nuestro cuerpo nos permite vivir: viajar, hacer planes, investigar, estudiar, trabajar, hacer deporte, leer, ver una película… por eso es digno de respeto.
Si comenzamos a apreciar nuestro tipo y también a valorar y aceptar lo que somos, por lo tanto intentaremos sentirnos bien y gustarnos aún más.