El agua corporal es importante para ejecutar todos los procesos físicos, así como las respuestas bioquímicas que ocurren www en nuestro cuerpo. Preservar un equilibrio justo de nuestro “balance hídrico” (proporción entre las “entradas” y las “salidas” de agua) es, por tanto, fundamental para mantener un buen estado de salud a corto, medio y largo plazo.
El agua no tiene calorías y además cualquier tipo de ajuste temporal en el peso corporal debido a una mayor pérdida o una mejor retención de agua es engañoso y de corta duración. Siempre disfrute de la sensación de sed e incluso intente esperarla bebiendo suficiente, generalmente 1,5 – 2 litros de agua por día (8 vasos): también recuerde que los niños están mucho más expuestos al riesgo de deshidratación que los adultos.
Beba regularmente y también en porcentajes
Consumir despacio, especialmente si el agua está fría: en realidad, una disminución inesperada de la temperatura del estómago puede crear problemas de bloqueo dañino.
- Las personas mayores deben acostumbrarse a comer con frecuencia durante el día, durante y fuera de las comidas, incluso cuando no se sientan sedientas.
- El equilibrio hídrico debe mantenerse básicamente bebiendo agua, tanto del grifo como mineral, tanto segura como controlada.
Recuerde que diferentes bebidas (como refrescos de naranja, bebidas tipo cola, jugos de frutas, café, té) además de proporcionar agua también proporcionan varios otros compuestos que contienen calorías (por ejemplo, azúcares simples) o que son farmacológicamente activos (como un ejemplo de altos niveles de cafeína).
Estas bebidas deben utilizarse con moderación.
No está bien dejar de beber por la ansiedad de sudar en exceso (la sudoración es vital para regular el nivel de temperatura corporal) o engordar (el agua no aporta calorías).
Durante y después del ejercicio, beba para recuperar rápidamente y de inmediato las pérdidas debidas a la sudoración, utilizando principalmente agua.
En problemas patológicos particulares que provocan una mayor pérdida de agua (por ejemplo, estados febriles o episodios repetidos de diarrea), el agua perdida debe reponerse de manera efectiva y también sin demora.
Usa poca sal
recomendaciones de sal nutrición saludable nutricionista florencia Tanto la preferencia como las propiedades orgánicas residenciales de la sal de mesa (cloruro de sodio) generalmente están relacionadas con el sodio.
En condiciones normales, nuestro organismo elimina diariamente una determinada cantidad de sal, que debe reintegrarse a la dieta. Sin embargo, no es necesario incluir sal en los alimentos, ya que el sodio que se tiene en la naturaleza en los alimentos actualmente es suficiente para cubrir las demandas del organismo.
Disminuir la cantidad de sal que se ingiere todos los días no es complicado, especialmente si la reducción ocurre progresivamente.
- De hecho, nuestro paladar se adapta fácilmente, y además es posible reeducarlo a alimentos menos salados.
- Dentro de unos meses, o tal vez semanas, estos mismos alimentos se verán perfectos, mientras que los experimentados en el método anterior también se verán salados.
Un uso normal de sal por debajo de los 6 g diarios (1 cucharadita), correspondiente a una ingesta de unos 2,4 g de sal, representa una buena concesión entre satisfacer el gusto y también prevenir los riesgos relacionados con la sal.